RESUMO
Fundamento: En los últimos años se ha recomendado la práctica de ejercicio físico en todas las edades. No existe un consenso unánime para establecer recomendaciones concretas sobre el tipo y nivel de actividad física necesario para mantener la salud en los niños y adolescentes. El objetivo de este trabajo es evaluar el estado de forma física y los hábitos de vida relacionados con la alimentación y la práctica de ejercicio físico de un colectivo de adolescentes de Bilbao Material y método: Se ha realizado un estudio transversal en un colectivo de adolescentes con edades entre 13 y 15 años (n=75), 36 hombres y 39 mujeres. El protocolo de estudio contemplaba hábitos alimentarios, práctica deportiva usual y actividad física en el colegio y durante el fin de semana, exploración antropométrica y estimación de la forma física a partir del volumen máximo de oxígeno determinado mediante una prueba de esfuerzo submáximo, el Step-test de Astrand. Se monitorizó durante el esfuerzo la frecuencia cardiaca y la tensión arterial sistólica y diastólica. Resultados: El 33 por ciento de los hombres y el 35 por ciento de las mujeres realizaba consumos adecuados de frutas. Para el grupo de las verduras se observaron consumos adecuados en el 19 por ciento de los hombres y en el 40 por ciento de las mujeres. El 28 por ciento de los hombres y el 46 por ciento de las mujeres consume más de 3 raciones de bollería semanales. El 80 por ciento de los hombres y el 46 por ciento de las mujeres practicaba deporte más de 1 día a la semana. Ninguna de las mujeres que practicaba deporte realizaba control de su forma física. El porcentaje de hombres que lo hacía era del 11 por ciento. Conclusiones: Es necesario conocer con mayor detalle los patrones de actividad física y deportiva en la población escolar y adolescente de nuestro entorno y disponer de instrumentos que permitan realizar un seguimiento. Los resultados preliminares ponen en evidencia patrones de consumo alimentario inadecuado y un estilo de vida predominantemente sedentario (AU)